Las fuentes escritas y la arqueología, han demostrado que las murallas de la Madina de Murcia, eran bien fuertes y resistentes.
Así está documentado que en agosto del año 896, las tropas Omeyas tras asediar los castillos de la provincia y conquistar el difícil emplazamiento de Ricote, acamparon en Molina de Segura cerca del río. Desde allí lanzaron un duro ataque contra Murcia y la asediaron durante 10 largos días. Pero las murallas de la joven ciudad, aguantaron y frustraron la conquista Omeya.
Murcia desempeñó un papel muy importante en época almorávide. Durante este periodo, las defensas de la ciudad se reforzaron. Entre sus gobernantes destacan Ibn Mardanis “Rey Lobo” y Muhammad b. A`isa, que tan seguro se encontraba en el emplazamiento murciano que, a partir de 1097, encabezó una serie de ataques contra la frontera central de la península y las posesiones del mismísimo Don Rodrigo Díaz de Vivar “Cid Campeador”. En estas luchas, resultaron determinantes las tropas destacadas en la ciudad de Murcia.
Fuente: Murcia, ayer y hoy. Génesis y evolución urbana de Murcia en la Edad Media. Pedro Jiménez castillo y Julio Navarro Palazón.