En Algezares se produce una curiosa coincidencia que pone de manifiesto la importancia del agua para los murcianos de todos los tiempos. El Santuario de la Luz estaba consagrado a Deméter, diosa griega de la agricultura. Cuya imagen presidía desde la montaña la vega del Segura en el siglo III a.C. En este Santuario se …
La Feria de Septiembre murciana no empieza hasta que la patrona de la ciudad, la Virgen de La Fuensanta, baja desde su Santuario hasta la Catedral.
Son cientos de murcianos los que acompañan a Nuestra Señora de la Fuensanta, en esta romería desde el monte hasta la ciudad. Previo paso por la Iglesia del Carmen, donde recibe el primer tributo entre otros por la Cofradía de la Preciosísima Sangre, “los coloraos” que procesionan cada miércoles santo.
En 1808, Murcia apenas era un pueblo de 20.000 habitantes, pero le plantó cara al mismísimo Napoleón.
Al año siguiente junto con Huelva y Cádiz, Murcia fue la única ciudad que se mantuvo independiente de los franceses.
Estas “tapas” de metal las podéis encontrar en las principales calles del centro de la ciudad.
El “motivo” que presentan es un pequeño homenaje a la Patrona de Murcia, La Virgen de la Fuensanta.