Durante el siglo XVII, la Virgen de la Fuensanta no era una de las advocaciones con mayor devoción para los murcianos.
Como lo demuestra el hecho de que no fue sacada en procesión en 1648, cuando se llevaron hasta la Catedral las imágenes de: la Virgen de la Arrixaca, San Roque, San Sebastián y la Virgen de los Remedios; con la finalidad de atraer las lluvias hacia la huerta murciana.
La Patrona del Reino, y por tanto de la ciudad de Murcia, era la Virgen de la Arrixaca. Que contaba desde siempre con el cariño popular, era sacada continuamente en
Leer más