¿Puede ser Cartagena la desaparecida y misteriosa Tartessos?
La aventura de la arqueología ha dado historias a la humanidad dignas de Hollywood. Como por ejemplo aquella locura del millonario Schliemann que se empeñó en que el bueno de Homero describía lugares históricos en su Iliada, y no paró hasta que descubrió Troya. Algo parecido, pero con distinto final, es lo que le aconteció al historiador alemán Adolf Schulten. Vivió obsesionado …