Los que somos del Barrio del Carmen sabemos bien donde se encuentra el bar Pepe el de los Jamones. No creo que haga falta decir cuál es la especialidad del local.
En esta esquina del Paseo Corvera, entre otras cosas, se preparan buenos bocatas de jamón y el bar tiene un curioso eslogan: “No son Catalanas, son Murcianas”…. Bien, pasemos a analizar la frase.
En Murcia todos sabemos lo que es (culinariamente hablando) una catalana: bocadillo de jamón con tomate. Bien puede llevar el tomate “restregao” o cortado en lonchas. En algún sitio he oído llamar al invento “pan tumaca”, una derivación clara del idioma catalán.
Este bocadillo es sin duda un icono de la gastronomía catalana. Aunque según las fuentes no se trata de un invento 100% catalán. Y es que resulta imposible arraigar esta simple combinación de ingredientes, a un punto geográfico concreto. Además existen múltiples variaciones: tostada de jamón con aceite, con ajo, salmorejo, gazpacho… donde vayas encontrarás una tapa típica o plato que utilice pan, tomate, jamón y aceite.
Lo que está claro es que el tomate es una hortaliza procedente de América y que con el descubrimiento pasó de lleno a la gastronomía española. Lo que apuntan los compañeros del diario ABC, es que “la catalana” fue un invento de los trabajadores murcianos que construyeron el Metro de Barcelona. Utilizaban el tomate para ablandar el pan duro que les daban en la obra.
Una vida dura la de estos murcianos en Cataluña. Al menos en la memoria quedará su paso a la historia por un gesto que a la vez de simple, está delicioso.
Trabajadores murcianos del metro de Barcelona,años 20 , plantaban tomateras al lado de los raíles para untar el pan. pic.twitter.com/AEOLmsIhM8
— Raíces Murcianas (@RAICESMURCIANAS) agosto 9, 2015