Puerto de La Cadena, ubicado en la localidad de El Palmar – Murcia, ha sido desde la antigüedad el paso natural entre la ciudad portuaria de Cartagena y el interior de la Península Ibérica.
Dominando este estratégico e importante enclave, se proyectó una fortaleza militar que estaba llamada a ser una de las más importantes en todo el Reino de Murcia. Se trata de lo que hoy conocemos como las ruinas del Castillo del puerto de La Cadena o Castillo de la Asomada.
La presencia humana en estos lares se remonta a la Edad del Bronce, se han documentado restos de cerámica argárica en sus proximidades. Aunque fueron los romanos los que primero empezaron a modificar el paisaje en el puerto de La Cadena; en su rambla se conservan tramos de la calzada romana (un ramal de la Vía Augusta) que unía las ciudades de Cartagena y Toledo.
Puerto de La cadena y sus tortugas de 2 metros
Cierto es que los vestigios más antiguos que se han encontrado en el paraje del puerto de La Cadena, son mucho más lejanos en el tiempo. Se trata de cientos de restos de animales prehistóricos tales como: mastodontes, jirafas, monos, rinocerontes e hipopótamos. Aunque lo que más llamó la atención en este descubrimiento, fueron los caparazones de 3 tortugas pertenecientes al Mioceno, de más de 2 metros de longitud.
Volviendo al Castillo del puerto de La Cadena, fue el último gran proyecto del rey murciano Ibn Mardanish “rey Lobo”, que quedó inconcluso por falta de financiación. Las obras se proyectaron en lo alto del morrón del puerto de La Cadena, a unos 530 metros de altura y sobre los restos de otra fortificación romana. De hecho la planta del castillo es cuadrada (50 metros de lado), al estilo romano y no como edificaban los árabes. Los muros son de tapial y mortero como la antigua muralla de Murcia, había proyectados 10 torreones que tenían que medir cerca de los 14 metros de altura.
Desde allí arriba se avista todo el Campo de Cartagena, el Mar Menor y las vegas del Segura y el Guadalentín.
Puerto de La Cadena, en comunicación constante con la costa murciana
Una fortaleza la del puerto de La Cadena, que tenía comunicación visual con las pequeñas torretas esparcidas por los campos en dirección al mar. Utilizadas para defender los cultivos y hacer señales de humo a fin de avisar sobre los desembarcos piratas en la costa. Este castillo del puerto de La Cadena, salvaba la cordillera de El Valle-Carrascoy y a su vez mandaba señales a la torre de Santa Catalina, de este modo las autoridades de Murcia se enteraban de las incursiones berberiscas en las costas de Cartagena, Mazarrón o Águilas.
Vaya. Fui de excursión hace dos semanas y no sabía nada.
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