La Sierra del Valle y Carrascoy fue desde la baja Edad Media, morada de ermitaños y ascetas que vivieron en obediencia, pobreza, silencio y castidad. Se alojaron en cuevas y llevaban una vida de oración y convivencia con la naturaleza.
Muchos monjes han sido los que han pasado por aquí. Especialmente se recuerda a Juan el Pobre, que vivió por estas cuevas en el siglo XVI. Gracias a él se empezó a construir la ermita de San Antonio el pobre (La Alberca, Murcia) en 1735, bajo un estilo barroco popular murciano. Su arquitecto, José López, realizó también el tercer cuerpo de la torre de la Catedral de Murcia.
La ermita se construyó por la demanda de los vecinos de la zona, que querían visitar a los monjes y realizar algunos ejercicios espirituales con ellos. Se aprovechó lo que en un inicio era una cueva horadada en la montaña.
Dedicaron la ermita a San Antonio Abad, iniciador de la vida eremítica. Nació en el año 251 d.C. en Egipto y vivió su vida por el Mar Rojo como anacoreta. Según cuentan, eran los mismos pájaros los que le llevaban pan para que se alimentase mientras oraba.
Estos monjes del Valle, con el permiso del Obispado, finalmente se constituyeron en una hermandad: los Hermanos de La Luz.
San Antonio el Pobre no esta en Santo Ángel sino en La Alberca
Así es, ya lo hemos corregido. Muchas gracias por el apunte.