Estas tierras de El Saladillo, presentan la estampa del más árido secano. Las pocas gentes que a lo largo de la historia se han atrevido a asentarse en ellas, vivían de los cultivos de cereal y de la producción de esparto. Aún se conservan en el lugar, alguno de los secaderos de esparto. Esta industria se remonta a tiempos de los romanos como mínimo, ya que se han encontrado utensilios de esparto utilizados por ellos en las antiguas minas de Coto Fortuna.
En estas tierras se asentó la Compañía de Jesús, ya que tenía arrendadas algunas parcelas en el lugar. Los jesuitas llevaban a Murcia y otras localidades, las producciones de cereal y esparto. De esta presencia de la Compañía, se supone la noticia de un vía crucis conocido como el “Camino de los Pasos”, con cruces de madera dentro de pequeñas hornacinas en el camino que lleva hasta el Cabezo del Cantalar.
Es posible que la Ermita del Saladillo o de San Antonio, tenga que ver con este vía crucis. Pero de lo que no cabe duda, es que la ermita está relacionada con la actividad de los jesuitas en la zona.
Fuente: regmurcia