Hasta el siglo XIX, el esparto era toda una industria a la que se dedicaban muchas familias murcianas.
En la zona de Águilas por ejemplo, se establecieron desde finales de siglo, algunos comerciales británicos que con el tiempo monopolizaron las exportaciones del producto.
Una firma británica consiguió la autorización provisional para colocar unas vías de tren que transportaban el esparto manufacturado hasta el puerto. Desde donde se enviaba hasta Gran Bretaña, el principal comprador de este producto.
En Lorca existió un sindicato, que tenía como propósito vender directamente el producto sin intermediarios, a fin de aumentar la ganancia para el agricultor.
Fuente: Murcia en el primer tercio del siglo XX. José Antonio Ayala.