Seguimos desgranando (en la medida de lo posible…), el misterioso hurto.
El asesinato del abogado Manuel Martínez Alcaina no hizo otra cosa que avivar las llamas de la especulación y lo paranormal.
No en vano era bastante extraño todo lo que rodeaba al homicidio: no se conocen los interrogatorios a José Luelmo, ya bien porque se declararon “secreto de sumario” o se perdieron con el pasar de los años; Martínez Alcaina tampoco dejó ningún escrito de sus averiguaciones (o no se ha encontrado…), ni hay constancia de que hablase con alguien de la cuestión.