Tras siglos habitando estas tierras, fundar la ciudad de Murcia, dominar la Península Ibérica a través de su taifa y dar figuras históricas tan importantes como el místico murciano Ibn Arabí, Al Mursi a cuya persona está dedicada la mezquita más bella de Alejandría o el poeta cartagenero Al Qartayanni; la época islámica en Murcia llegaba a su fin.
Los motivos fueron varios. Con la conquista castellana del Reino de Murcia, sus tierras son repartidas entre los nuevos inquilinos que empujan a la población islámica a los arrabales y al exilio de Granada.
Las revueltas de la población musulmana no tardaron en producirse. Se sucedieron tristes acontecimiento como el de Huércal, donde tropas cristianas masacraron a un grupo musulmán que partía al exilio, aunque contaban con un salvoconducto del rey castellano. La convivencia entre cristianos y musulmanes estaba condenada al fracaso.
En próximas fechas, exactamente del 23 al 26 de abril, se reunirán investigadores de España, Marruecos y Túnez en el Congreso Descendientes de Andalusíes Moriscos en el Mediterráneo Occidental. El congreso se realizará en la localidad murciana de Ojós (Valle de Ricote), importante núcleo de la comunidad morisca murciana, y se debatirá sobre la expulsión de los moriscos y su difícil relación con el mundo cristiano.
Fuente: Revista Novápolis