Castillejo es un palacio fortificado que pertenece al entorno del complejo palatino de Monteagudo y en la actualidad es un edificio con la catalogación de Bien de Interés Cultural (BIC).
Levantado sobre una loma desde la que se vigilaban los terrenos regados por el río Segura y las vías de comunicación del lugar como son la Senda de Granada y el Camino Viejo de Monteagudo que en su inicio fue vía romana. En sus días de esplendor, el Castillejo, dominaba una bonita almunia agrícola rodeada de jardines y huertos.
Exteriormente la fortaleza presenta la imagen sobria de cualquier edificio defensivo de la época. Se distribuye en dos alturas con muros y torres a base de tapial de argamasa. Técnicas y materiales idénticos a la Muralla Medieval de Murcia o las fortalezas del puerto de La Cadena. En su interior la fortaleza se convertía en palacio, con un gran patio en el centro y lujosos espacios de recreo. En la actualidad nada queda de todo esto. Todo destruido. En la noche de los tiempos, sus dueños lo derribaron todo construyendo en el interior una balsa para regadío.
Castillejo de Monteagudo y La Alhambra de Granada
Pero las investigaciones, documentos y trabajos arqueológicos realizados antes de este desastre, determinan que el Castillejo de Monteagudo sería artísticamente el antecesor del Patio de los Leones de La Alhambra granadina. Esto nos tiene que hacer reflexionar sobre la importancia de este entorno y su patrimonio perdido.
Para muchos entendidos estamos ante la residencia oficial del famoso jefe de la Taifa de Murcia, Ibn Mardanis «Rey Lobo». Mardanis dominó y defendió la Península Ibérica frente a la invasión Almohade del siglo XII. Al final estos religiosos/guerreros norteafricanos terminaron imponiéndose y, según las crónicas medievales, se apoderaron del Castillejo en el año 1170.
Fotos: En la segunda foto vemos la fortaleza de Monteagudo vista desde las ruinas del Castillejo.