El Cabezo de la Jara (Puerto Lumbreras) a 1102 metros de altitud, guarda una curiosa leyenda relacionada con una de sus cuevas.
Para conocer la historia, tenemos que trasladarnos al siglo III a.C. durante el transcurso de la II Guerra Púnica. Como sabemos, las guerras púnicas enfrentaron Roma contra Carthago y buena parte de esas luchas se desarrollaron en territorio de la Región de Murcia.
Según cuentan las crónicas, el Senado de Roma decide enviar a España a sus legiones, bajo las órdenes de Publio Cornelio Escipión. Su misión era ayudar a su hermano Cneo, en la lucha que éste llevaba contra los Cartagineses en Tortosa.
Juntos los dos hermanos, derrotan y avanzan victoriosos por todo el levante peninsular. Pero en una emboscada, el cartaginés Asdrúbal Barca, consigue dar muerte a Publio. Cneo, con sus tropas diezmadas, se refugian en Illorci (Lorca). Allí se desarrolla la famosa batalla de La Monda, donde el romano es derrotado y muere en el año 211 a.C.
Hasta aquí la historia. La leyenda cuenta que el cuerpo de Cneo, fue enterrado en el Cabezo de la Jara, en la cueva que hoy se conoce como la del Escipión. Una cueva adornada con helechos y musgos bien conservados gracias al vapor de agua que se condensa en su entrada.
Fuente: Las Comarcas Naturales de la Región de Murcia. Comarca del Valle del Guadalentín
Cabezo de la Jara, la cima de Puerto Lumbreras pic.twitter.com/qetgZ2oF67
— PedroAntonio Sánchez (@PedroAntonio_RM) 9 de septiembre de 2017
De la cueva de los Escipiones, aparte de la espuela de plata allí encontrada, lo interesante es la «rogum scipionis» de Plinio el Viejo y de Fray Pedro Morote, así como la escultura dedicada a Emilia la matriarca de los Escipiones, que se puede contemplar en el xerojardín del Cortijo Los Nopales.
La batalla de la monda no se desarrolló en Illorci.
El Sr. Scipión está enterrado en Lorquí, con vistas al valle de la Vega Media.